Los Palmares de Castillos: Un Tesoro Natural de Rocha


En el corazón del departamento de Rocha, al este de Uruguay, se encuentra uno de los ecosistemas más singulares y fascinantes del mundo: los Palmares de Castillos. Este paisaje, dominado por la palma butiá (Butia odorata), no solo es un espectáculo visual, sino también un patrimonio biocultural que combina historia, biodiversidad y tradiciones locales. A continuación, exploramos la magia de este lugar único, sus características, su importancia y cómo puedes disfrutarlo.

Los Palmares de Castillos se extienden por unas 70.000 hectáreas, principalmente alrededor de la ciudad de Castillos, en el Camino de los Indios, y en áreas cercanas como San Luis y los Humedales del Este, cerca de la frontera con Brasil. Estas palmeras, que pueden alcanzar entre 7 y 9 metros de altura con troncos de hasta 60 cm de diámetro, forman bosques que crecen en llanuras, sierras y zonas inundables, creando un paisaje que es emblema del departamento de Rocha. De hecho, el palmar está presente en los símbolos oficiales de la región, así como en su poesía y música folclórica.
Lo que hace a este ecosistema tan especial es su composición y su historia. Las palmeras butiá, con sus hojas de color verde ceniciento y una renovación anual de unas 14 hojas de 2 a 3 metros de largo, son centenarias, con muchas de ellas alcanzando entre 200 y 300 años de edad. Sin embargo, este ecosistema enfrenta desafíos significativos, ya que la regeneración natural es escasa debido al sobrepastoreo y las actividades agrícolas que afectan los renuevos de las palmas.

El fruto de la palma butiá es una joya de la región. De color amarillento anaranjado y sabor agridulce, el butiá madura en la primera quincena de abril y es la base de una rica tradición gastronómica. Los habitantes de Rocha han sabido aprovecharlo para crear licores, dulces, mermeladas, jaleas y salsas, todos elaborados con técnicas artesanales que se transmiten de generación en generación. Además, las semillas molidas y tostadas se usan para preparar un «café de coco», una infusión que se mezcla con leche o se agrega al mate, y la miel producida por las abejas locales, basada en el polen de butiá, es famosa por su color ámbar claro y su alta calidad.
El butiá no solo es un alimento versátil, sino que también tiene usos tradicionales. Las hojas de la palmera se emplean para fabricar esteras, rellenar colchones, construir quinchos e incluso como forraje para el ganado en tiempos de sequía. Este aprovechamiento integral refleja la conexión profunda entre los habitantes de la región y su entorno natural.

A pesar de su belleza y valor, los Palmares de Castillos están en una situación de vulnerabilidad. La falta de regeneración, causada principalmente por el pastoreo de ganado y cerdos que consumen los brotes jóvenes, amenaza la supervivencia de este ecosistema. Aunque existen leyes en Uruguay que prohíben la destrucción de los palmares y el corte de palmas, estas medidas no han sido suficientes para garantizar su regeneración. La introducción de monocultivos, como los de eucalipto, también ha impactado negativamente al alterar el hábitat natural de las palmeras.
En respuesta a estos desafíos, en 2024 se declaró el 13 de marzo como el Día Nacional del Butiá, una iniciativa que busca promover la conservación de los palmares y fomentar su uso sustentable. Este reconocimiento resalta la importancia del palmar como patrimonio biocultural y apuesta por la preservación de su biodiversidad y recursos genéticos.

Visitar los Palmares de Castillos es una experiencia inolvidable. Además de su belleza natural, la zona ofrece una amplia gama de actividades de ecoturismo. Cerca de la Laguna de Castillos, un espejo de agua de 8.000 hectáreas conectado al océano Atlántico a través del arroyo Valizas, los visitantes pueden disfrutar del avistamiento de aves (con 256 especies registradas, como el flamenco austral, cisne de cuello negro y chajá), observar animales autóctonos como carpinchos, nutrias y gatos monteses, o recorrer el Monte de Ombúes en kayak o a caballo.
Para obtener las mejores vistas, te recomendamos detenerte en el kilómetro 246 de la Ruta 9, donde podrás contemplar una postal espectacular de la laguna con el océano de fondo, o subir al Cerro Agapito (km 251) para una panorámica de la región. También puedes visitar corrales de palmas en el kilómetro 257, ideales para apreciar la majestuosidad de este paisaje.

Los Palmares de Castillos no solo son un atractivo turístico, sino también un legado que debemos proteger. Si visitas la zona, respeta las normativas locales, como la prohibición de cazar, acampar o encender fuego. Apoya a los productores locales comprando productos derivados del butiá, como dulces o licores, y participa en actividades que promuevan el uso sustentable de este recurso. Además, difundir la importancia de este ecosistema único puede inspirar a otros a valorarlo y protegerlo.

Los Palmares de Castillos son mucho más que un paisaje; son un símbolo de la identidad de Rocha y un recordatorio de la riqueza natural y cultural de Uruguay. Su singularidad, su biodiversidad y las tradiciones que giran en torno al butiá los convierten en un destino imprescindible para quienes buscan conectar con la naturaleza y descubrir un pedazo de historia viva. La próxima vez que visites Rocha, no dejes de explorar este tesoro y contribuir a su preservación para las generaciones futuras.